Ref: De Mackay a Pálpito puesto el 22/9/99 0:08
Hale, hale, ya está redimido Perdigón. En cambio, el pobre Almedo...
Ref: De Mackay a Lía puesto el 22/9/99 0:11
Tras árduas conversaciones con el buen Perdigón, en las que tuve que emplear a fondo mis dotes diplomáticas y psicológicas, logré convencer al rey de que tenía que hacerle caso al impulso que le aconsejó Pálpito y salir a luchar.

En cuanto a lo del final cercano... No sé, no sé. Parece que ya hemos rebasado la mitad de la historia, pero aún quedan cabos sueltos, ¿no crees? :-)))))
Ref: Perdigón y Ancara puesto el 22/9/99 0:11
La brisa mecía los cabellos de Iroste. Era de noche, y sólo se oía el rumor del agua al chocar contra el casco pétreo del navío. La figura de Uriom, silenciosa e impotnente a sus espaldas, se recortaba en la penumbra. El príncipe miraba a la estrella Sig. Pero, a pesar del entorno apacible, Iroste se sentía inquieto, y no deseaba dormir. No obstante, ya bien entrada la madrugada, se quedó dormido.
Y, en la mente dormida de Iroste comenzaron a perfilarse imágenes. Contempló el ejército de su padre, en todo su esplendor, ocupando la parte alta de un valle. Pero no era Perdigón, sino Almedo quien lo comandaba. Almedo miró hacia el valle, e Iroste vio a través de sus ojos. El ejército enemigo, una formación enorme de figuras resplandecientes, avanzaba con decisión. La oscuridad, dijo Almedo; la luz, repuso la mente dormida de Iroste. El príncipe se daba perfecta cuenta de lo que iba a suceder, pero no podía sino observar: era su amarga obligación. Almedo era un buen general, sin embargo, en aquella ocasión se las veía con un rival que excedía sus posibilidades. El que había sido su buen amigo, apenas pudo emitir órdenes. El ejército de la luz, sin previo aviso, cargó contra el de Perdigón. Los tercios de infantería de su padre mostraron su coraje, el que les había convertido en unos de los mejores del mundo, siendo aniquilados sin romper la formación. La caballería real tuvo algún éxito en el ala izquierda, pero terminaría por ser barrida. Almedo estaba en el centro del frente, y luchaba con desesperación. Y la idea de que algo no cuadraba, de que sus enemigos no parecían demonios, llegó a pesarle como una losa. Un certero sablazo le derribó del caballo, y quedó en el suelo, moribundo. Y un ramalazo de sabiduría postrero le hizo ver la verdad. Lucha por lo que crees justo, le había dicho su bien amado rey; y comprendió que su fe había sido errónea. La táctica de Atfal era enfrentar a sus enemigos entre sí. Su ciega obediencia a Atfal había obligado a la luz, su aliado potencial, a acabar con él; porque no era el mal, sino el bien, lo que había intentado combatir. Porque el mal lo encarnaba Atfal, y Perdigón, y, sobre todo, Iroste, siempre habían tenido razón. La amargura llenó los últimos latidos de su corazón. Iroste no podía más, quería despertar, dejar de ver aquellas imágenes de pesadilla... Pero era incapaz, y creyó que iba a volverse loco.
Y de pronto, la oscuridad invadió su mente, con lentitud, de una forma que le era familiar... Y su corazón se llenó de gozo. Vio el barco desde fuera, y vio su propio cuerpo. Una sombra estaba junto a él, y le acariciaba los cabellos con dulzura. Ignoraba si se trataba de un sueño o de la realidad, pero Iroste supo que se trataba de Ancara. Dentro de su sueño quedó dormido otra vez; y nuevas imágenes le vinieron a la mente; una playa, un cuerpo que era llevado en brazos...

Cuando Iroste despertó, estaba sobre un suelo enlosado. Frente a él había tres puertas iguales. Recordó las palabras de Uriom... Pero todas las puertas eran iguales. ¿Cómo iba a elegir la correcta?
El viento murmuraba en su lengua, esa que ya nadie recuerda, mientras Iroste, de pie, miraba con atención las tres puertas idénticas. Luego las palpó, y halló que una de ellas estaba muy fría; y dedujo que ésa le llevaría al océano. Parecía demasiado fácil, pero es que nadie que no supiese qué había tras esas puertas podría haber descartado aquella. Las otras dos estaban igual de tibias, de manera que seguía teniendo problemas.
¿Cómo discernir el fuego de la luz? Ambos dan calor, ambos dan esperanza. Entonces recordó a su primer amor, una muchacha que, como supo un tiempo después, ya estaba prometida. Recordó su pena, y también sus dudas. Pero, sobre todo, recordó su decisión: olvidarla. Ella ya era feliz con su prometido, y lo último que él deseaba era hacerla desgraciada. En vez del fuego egoísta de la pasión, que devora a quien le alimenta, eligió la generosidad de la luz que crea el amor cuando es sincero. Iroste siempre había preferido la luz al fuego; él sabía qué puerta tomar, sólo necesitaba oír a su corazón...
Sin titubeos, cerró los ojos y abrió la puerta de la derecha.



Perdigón ya se lo temía, pero el desámino estuvo a punto de vencerle cuando vio regresar al castillo a los restos de sus tropas. Apenas cien caballeros maltrechos, muchos de ellos heridos. La infantería exterminada. Pero pronto se repuso. Añadió a su exigua milicia ciudadana a los caballeros en condiciones de luchar, y dio la orden más amarga de su vida. Todos los que no podían combatir abandonaban Kovar en tropel. Instantes después, la hermosa Kovar ardía por los cuatro costados. Atfal jamás dominaría su reino, jamás. Perdigón era un soldado, y el deber de un soldado es luchar hasta el fin. Con un gesto hizo avanzar a su pequeño ejército hacia las montañas, donde ejercerían su última resistencia.
Lo único que Perdigón le pedía al cielo era que le permitiese ver por última vez a Iroste; pero no creía que se lo fueran a conceder.


Mackay.
Ref: mackay puesto el 22/9/99 0:18
Gracias por escribir.Aldith.
Ref: ALBA puesto el 22/9/99 0:36
Siento no haberme despedido. Un beso para los dos, TVR y TIBERIO.
Ref: puesto el 22/9/99 1:49
Ref: Perdigón y Ancara puesto el 22/9/99 9:51
Perdigón cruzó los últimos metros que le separaban de la montaña a pie, al lado de su caballo Agreste. Sabía que su caballo presentía la batalla, al igual que sus hombres, pero la decisión de Perdigón no incluía un enfrentamiento abierto en medio del campo. Su intención era muy distinta. Distribuyó a varios grupos por el bosque, ordenándoles que cavaran trampas para osos en el suelo, y que añadieran estacas mirando el cielo en las trampas. A otro grupo les hizo ascender por la montaña. Quería vigías que le avisaran de la llegada de Atfal, no le cogería por sorpresa.
Las mujeres, que también habían armado a sus hijos mayores de seis años, empezaron a cortar troncos y a recoger piedras de distintos tamaños, para almacenarlos en lo alto de una pequeña cumbre por la que el mermado ejército de Atfal debía pasar inevitablemente.
Perdigón aspiró hondo, y de su corazón surgió una plegaria. Cuando terminó de rezar, se acercó a los caballeros que le esperaban junto al río.
_. Preparémonos para vencer o morir.-


Iroste cruzó el umbral de la puerta que había elegido, y la luz más cegadora le quemó los ojos. Los cerró y recordó las palabras de Uriom. Debía correr sin detenerse, sin mirar la luz, y emprendió una carrera rumbo a lo desconocido. Sentía el calor en su piel como una caricia, mientras sus pies se deslizaban veloces sobre un suelo impreciso.
De repente notó como si una selva espesa le fuera cerrando el paso. Con las manos y brazos, apartaba lo que creía eran hojas de esa jungla de la que le hablara Uriom. El aire empezaba a viciarse y le costaba respirar, pero Iroste siguió adelante, nada le detendría. Debía llegar al "Ojo de Luz".

Las hojas se enredaban en sus manos y pies. Cayó, pero volvió a levantarse sin abrir los ojos. En otra caída, notó el sabor dulzón de su propia sangre resbalándole por la nariz, pero siguió avanzando. ¡Corre Iroste, corre!, oía la voz de Ancara animándole a seguir. ¡Corre hijo, corre!, su padre también estaba allí dándole ánimos para que alcanzara su objetivo. ¡ Corre príncipe, corre!. Los ojos se le llenaron de lágrimas al reconocer la voz de Almedo. Su sueño había sido una premonición, y de algún modo estaba convencido de que su amigo había muerto esa noche. La imagen de Almedo dando muerte a su prometida, le golpeó el cerebro nuevamente, y por un instante estuvo a punto de desenvainar la espada y atravesar el corazón de Almedo en aquella visión que volvía a serle real y dolorosa.
¡ No pienses, corre!, Ancara seguía viva. ¡ No mires atrás! .Gritaba Perdigón. ¡Sálvame!, Almedo estaba de rodillas postrado ante él con el rostro cubierto de sangre. Pero Iroste borró nuevamente aquella imagen, y cayó nuevamente al suelo tropezando con una rama que se había interpuesto en su camino.


@@@Pálpito@@@
Ref: A Mack y Lia de Pálpito puesto el 22/9/99 9:53
Pues no se yo... me parece que aun le queda un poco para llegar al final... Así que dadle al coco, a ver como sigue. :-DDD
Ref: puesto el 22/9/99 9:59
Te espero
Ref: puesto el 22/9/99 10:32
Lo tengo chungo. ¿Nos vemos sobre las 12.30?.
Un beso
Ref: AINOA puesto el 22/9/99 12:44
NO sé, si alguien de los aquí presentes conocen un grupo mejicano de rock que se llama VANTROI. Estoy buscando la página Web Oficial o Piratas, algo.... S.O.S. ............................
Ref: AINOA puesto el 22/9/99 12:46
NO sé, si alguien de los aquí presentes conoce un grupo mejicano de rock que se llama VANTROI. Estoy buscando la página Web Oficial o Piratas, algo.... S.O.S. ............................
Ref: AINOA puesto el 22/9/99 12:46
NO sé, si alguien de los aquí presentes conoce un grupo mejicano de rock que se llama VANTROI. Estoy buscando la página Web Oficial o Piratas, algo.... S.O.S. ............................
Ref: Para un Halcón Peregrino puesto el 22/9/99 13:24
Del viento sacaste alas
que te llevan a mi querer,
del mar secaste lágrimas
un amanecer,
de la tierra me das fuerzas
para seguir siendo mujer,
ven a mi cielo esta noche,
y quédate otra vez.

Y si el frío te acobarda,
si temes que el huracán
te desvíe de mi querer,
volaré robando alas
y en las nubes te esperaré.

Una Orquídea sin distancias
Ref: Perdigón y Ancara puesto el 22/9/99 14:09
...Durante unos instantes Iroste permaneció en el suelo y poco a poco fue abriendo los ojos y sólo escudriñó tinieblas, sin ver nada. Pensó que se habría equivocado de puerta y con ello había quedado sumido en la más profunda de las oscuridades. Sus pies notaron que ahora el suelo era de ladrillo y sus manos no alcanzaban ningún ramaje. ¿ Dónde estaría ahora ?. ¿ Qué sorpresas tendría que asumir y vencer más?. Y ahora negado de luz, no podría dar un paso, pensó el joven, sintiendose morir. Y miró al cielo y pudo ver como en él se dibujaba y filtraba una luz. Iroste exhaló un suspiro e intento sonreir, aunque todavía le duraba la tensión nerviosa de los momentos pasados. Pero lo había logrado y además veía y su sonrisa contagió a los labios de quien allí enfrente estaba. Era un cuerpo de mujer lo que apareció ante su vista, de una mujer joven y hermosa que le tendió la mano y lo condujo hacia su cabaña. Y de repente el príncipe se encontró con que ella se precipitaba en sus brazos. Las lágrimas de la joven le mojaron el rostro mientras sentía los sollozos que desgarraban aquél pecho de mujer. Así estuvieron abrazados largo rato unidos por la emoción incontenible, dulce y hermosa del reencuentro.
Sí, porque la que gemía era Ancara y la que con voz suave le dijo :
- Yo quise morir para salvarte, sufriste mucho por mí, pero ya estoy aquí y debemos empezar una nueva existencia tranquila. Hoy es un día alegre para nosotros, Iroste...y entre los dos venceremos al malvado Atfal.- Y en su gesto había tal dulzura que el príncipe quedó maravillado, a la débil luz aparecía Ancara transfigurada e Iroste pudo observar que existía en ella una mágica luminosidad...
Lía.-
¿ Y una vez revivida Ancara y además estando con él, que pasará ?.
Ref: SOCRATES p/*.* puesto el 22/9/99 14:17
Vaya odisea de P & A. Cuando acabe me avisáis. (Aunque tiene mérito)
Ref: Del profesor milhombres.- puesto el 22/9/99 14:24
BREVES LECCIONES DE HISTORIA PATRIA


GUZMAN EL BUENO

Descuella gigantesco entre los episodios de acrisolado arrojo y valentía, fragmentos o jirones del heroismo patrio, el de Alfonso Pérez de Guzman, que, luchando en 1.294 contra un traidor, hermano de su Rey, Sancho IV El Bravo, fue sin escrúpulo intimidado por aquél a rendir la plaza de Tarifa o a ver degollar a su hijo, que el villano enemigo poseía en rehenes y exhibía aherrojado con ingentes argollas, al otro lado de la muralla.

No sucumbió la varonil entereza de Guzmán ante los ayes del enteco mancebo, ineluctablemente inmolado, y, lívidas las mejillas por el dolor, erguido y altivo el espíritu ante la defensa de la Patria, así exclamo, arrojando "motu proprio" desde el adarve su buida arma, que como severa reconvención de la rahez conducta del zaino homicida, zigzagueando, fue a caer al pie de la valla:

"....Y para que vean cuan inasequible es el rendimiento de la plaza y la falta a mis estrictos deberes, ahí va mi cuchillo, si acaso no tuviera arma el iluso D. Juan para realizar su atrocidad."

Tan cívica respuesta le valió el honroso título de Bueno y a través de los siglos permanece imborrable este hecho, cuyo singular estoicismo sirve de admirativa ejemplaridad a todas las generaciones.


ATENCION.........pregunta..........

¿Realmente Guzman el Bueno era tan idem?.- Razona la respuesta.

***milhombres.-
Ref: Proxi al parque puesto el 22/9/99 15:11
Buenos días
Lamento que mis apariciones por aquí sean tan imprevisibles, pero es que llevo unos días con trabajo atrasado y atrasandose más y mas.
Hay cosas delante en el orden de prioridades.
Llueve...me encanta.
Proxi, a ver si come...
Ref: AINOA puesto el 22/9/99 18:39
NO sé, si alguien de los aquí presentes conoce un grupo mejicano de rock que se llama VANTROI. Estoy buscando la página Web Oficial o Piratas, algo.... S.O.S. ...........................
Ref: De SOCRATES puesto el 22/9/99 18:49
Sobre Guzmán "el Bueno"...

Yo le hubiera puesto otros sobrenombres: el Resignado, el Cabezota, el Irreductible, el Segundo Abrahám, el Obediente, yo qué sé... pero el Bueno, lo que es el Bueno... O tal vez, y ya que estaba decidido a no rendir lla plaza,le hubiera ordenado al mejor arquero que lo hubiera ensartado para evitar torturas y sufrimientos. Eso hubiera justificado el nombre de "el bueno". Es muy difícil juzgar la historia,
Ref: puesto el 22/9/99 22:33
CALLAR ....... De si mismo, es HUMILDAD Los defectos ajesnos, es CARIDAD Las palabras inútiles, es PENITENCIA A tiempo, es PRUDENCIA En el dolor, es EROISMO Aliena melniborne (sacerdotisa griega)
Ref: puesto el 22/9/99 22:44
si,mi alma gemela...pero quien calla otorga....
Ref: Para sweet puesto el 22/9/99 22:56
La hora más dolorosa solo tiene 60 minutos.¡¡Animate¡¡¡ Un beso ,Ali.
Ref: puesto el 22/9/99 23:19
Tu silencio me envuelve en una sinfonía sin colores.
Ref: Roma, verano de 1999 puesto el 22/9/99 23:32
Parte I

Aquellos que sientan interés por conocer el mundo de nuestros antepasados romanos pueden considerarse dichosos. Después de unos trabajos de excavación que han durado aproximadamente unos veinte años, se ha abierto al público la "Domus Áurea" que era la residencia imperial de Nerón, último emperador de la dinastía Julía-Claudia a la cual también pertenezco. Está visto que en todas las familias hay ovejas negras :-DDD.
La Domus Áurea tenía un tamaño espectacular. Bien es cierto que de momento sólo se podrán visitar 32 de las 150 dependencias descubiertas. Da la impresión de que jamás haya existido una residencia de esas dimensiones: veinticinco veces más grande que el Palacio de Buckingham: se estima que tenía una superficie de ochenta hectáreas en las cuales se incuían vastos jardines y un lago artificial que estaba emplazado donde actualmente está el Anfiteatro Flavio o Coliseo.

*** TIBERIO. MCMXCIX ***
Ref: puesto el 22/9/99 23:32
Ref: Tvr puesto el 22/9/99 23:53
A veces, pero solo a veces, me pregunto si el tiempo es realmente tiempo o solo sueño.
***Tvr que se va dormir.Buenas noches.