Suena a toda pastilla el tema musical de Pretty Woman (Pretty woman walking down the street, pretty woman, the kind I like to meet, pretty woman, I don't believe you, you're not the truth, no one could look as good as you, Mercy!, Tiro, tatatiro tatatiro…) mientras ambos efebos van saliendo a la pasarela, cimbreando sus musculosas cinturas para delirio de la abundante muchachada congregada en primer término, ansiosas por tocar siquiera las pantorrillas de los finalistas. Un par de vueltas, unos guiños, ajustarse las gafas de sol (Pretty woman, stop awhile, pretty woman, talk awhile, pretty woman, give your smile to meeeeeee…) una mano al bolsillo y la otra sujetando la americana (Dajo prefiere sujetar mejor a la inglesa, que ha perdido el control y se ha abalanzado sobre él) y vuelta al centro del escenario (Pretty woman, yeah yeah yeah, pretty woman, look my way, pretty woman, say you'll stay with meee 'cause I need you, …). Cuando los agentes de seguridad logran doblegar por fin a la fan inglesa que, no obstante, aún forcejea tratando de zafarse de las manazas del vigilante, vuelve la voz en off de la presentadora anunciando que los sementales van a ser cuidadosamente examinados por las juezas…………….
La primera jueza se acerca a RedRose y le palpa el rostro. Mira el hueco de las orejillas, anota la mata de pelo que le sale por los orificios de la nariz y finalmente le estampa un beso en la mejilla (señal de aprobación). RedRose le devuelve el beso con tan mala fortuna que la dentadura postiza se le ha quedado pegada en la cara de la linda muchacha. Tras contener la arcada, se acerca luego a las inmediaciones de Dajo, dando un rodeo para evitar tropezar con su nariz ("No es siempre así de grande, ¿sabes?. Lo que pasa es que hoy he dicho algunas mentirijillas…") y, como puede, explora su rostro. "¿Y esto?", dice señalando sus hombros. "La sal, que estaba aderezando la ensalada y se me abrió el salero derramándose toda por encima de mi cabeza. En serio", responde Dajo, a quien, misteriosamente, le ha crecido la nariz dos centímetros más. A regañadientes, la mujer besa las mejillas de Dajo (algo tendría que ver el doloroso pellizco que éste le estaba propinado disimuladamente). Parece que los dos han pasado la primera prueba. Aplausos y gritos. ……………
"Y ahora ha llegado el momento más esperado -informa la presentadora con los ojos en blanco-: el STRIP TEASEEEEE!!!!!" Desmayos, gritos, prendas íntimas femeninas revoloteando por el escenario… Un espectáculo dantesco, vamos. La discoteca se queda a oscuras, haces de luz deambulan por el escenario proyectados por potentes focos, el láser zumba y traza dibujos imposibles en el aire viciado de la sala. Suena el tema principal de "Nueve Semanas y Media" (Ta pán, ta tan, te, tan, You can leave your hat on…) de Joe Cocker y se hace de nuevo la luz. Ambos candidatos a MISTER se mueven de forma lasciva y pausada. Varias chicas no pueden resistir tanta emoción, se desmayan y son retiradas en camilla. A estas alturas huelga decir que los dos guayabos, en competición con el, tan bien paisano, Antonio Banderas, lo dejarían para vestir santos. ………… Varios desmayos más tarde, llega el momento cumbre, cuando los dos espléndidos cuerpos posan ataviados sólo con un minúsculo tanga y son examinados por la afortunada 2ª jueza. La segunda jueza quita el hipo. Para no desentonar, luce el mismo look que Pamela en los Vigilantes de la Playa. Las mismas medidas que la Anderson, menos ropa que en el curro de la vigilanta. Se acerca al cuerpo hercúleo de RedRose. Lo mira atentamente, lo saborea… y le espeta: "¿Eso qué coño es?" RedRose señala el enorme cinturón de piel de elefante que aún conserva (junto con el tanga y los calcetines, las únicas prendas que porta). "Esto… je,je. Es para una amiga fetichista" "Quíteselo inmediatamente -entorna los ojos la jueza-. Esto es un concurso de belleza, no de Cocodrilos Dandee". RedRose acata la sugerencia con tan mala fortuna que la hebilla del cinturón de piel de elefante se le engancha con el tapón misterioso que sobresale de su abdomen. En ese momento, su cuerpo atlético sufre una espantosa involución y se desinfla. "¡Es un postizo!", exclama el auditorio decepcionado. ¿Recordáis la Pantera Rosa, cuando hizo lo mismo en una playa? Pues igualito. Compungido por saber casi perdido el concurso, RedRose mantiene aún la esperanza de que suceda algún milagro en el examen de Dajo. Pero va a ser difícil porque Dajo no tiene ningún postizo. Sin embargo… Cuando la doble de Pamela se acerca a Dajo, ya al primer vistazo, pregunta: "¿Te alegras de verme o es que guardas un conejo en el tanga?" Dajo, azorado, no sabe qué responder. "Haga descender eso inmediatamente", dice la jueza. Pero es inútil. Ya no hay posible marcha atrás. De modo que la jueza descalifica a Dajo y proclama campeón a RedRose. ¿Es esto justo? ¿Esta es la recompensa que tiene Dajo, después de haber sobornado a la presentadora y a la mitad del público para llegar a la final? ……………. Mientras RedRose procede a llevar el desnudo integral a su esperada conclusión, mientras toda la sala grita alborozada relamiéndose ante la traca final, cuando se produce la inenarrable escena final, el pobre Dajo se aleja del lugar, con el rabo entre las piernas… (Huy, perdón…)………………………………. DAJO,.el.descalificado
|