Ref: DAJO para... puesto el 25/7/01 0:48 |
ARGA. Mmmmmuack! :-) ¿Qué es eso de los once meses? ¿Has dado a luz a un oncemesino? NIVELAZO. ¿Autoengreimiento??? Juajuajuajuajuajua! En fin, me voy a reservar el apelativo. |
Ref: puesto el 25/7/01 1:40 |
Querido guardián, se te echaba ya de menos, no te imaginas cuánto, por cierto. Mañana ya estaré allí, sueño temido y deseado. Cuídate muchísimo y vuelve pronto, por favor. Un beso. |
Ref: LSV puesto el 25/7/01 1:44 |
:-) |
Ref: Arga a Dajo puesto el 25/7/01 1:57 |
Pues debe de ser al contrario... Veamos: que no es que haya salido de mí, sino que ha venido a mí, después de 11 meses y un día. No es fácil esto de que una hija adolescente se vaya casi, casi, a los antípodas, y vuelva, aunque con 17 años, prácticamente adulta. En fin...una es muy dura en apariencia, pero la verdad es que ha sido el año más largo de mi vida. Al menos, ha merecido la pena (para ella, está claro:-) |
Ref: Arga a Heimdall puesto el 25/7/01 2:00 |
Casi como que me parecía que lo había escrito yo. Pero creo que no merece la pena dar alas a los enfurruñones (te copio el palabro para otras ocasiones:-))) |
Ref: De Mackay a DAJO puesto el 25/7/01 2:03 |
Tu análisis de la necesidad que tenemos los seres humanos de “deificar” aquello que no conocemos, me ha parecido formidable, y estoy de acuerdo con él. Un elemento muy importante de respuestas obtenidas de manera no científica proviene de los fallos que nuestra intuición presenta a la hora de razonar sobre probabilidades. Una moneda puede caer con la cara por arriba, o con la cruz. La probabilidad de acertar como va a caer es del 50%, que es bastante grande. Si en vez del 50%, hacemos como los matemáticos y le asignamos probabilidad 1/2, nos es más fácil calcular la probabilidad de acertar varias veces seguidas, que será, sencillamente, multiplicar ese 1/2 tantas veces como veces tiramos la moneda. La probabilidad de acertar 10 veces seguidas es del 0,1%, aproximadamente. Es pequeña, pero si hay 10.000 personas tratando de acertar, unos 10 podrían lograr esa “proeza”, sin que posean ningún “sexto sentido” o algo similar. Supongo que así nacieron los adivinos: hacían predicciones simples que, por puro azar, se les cumplían dos o tres veces (estas probabilidades son muy elevadas. En el caso de la moneda, serían del 25% y del 11%). Una vez que los demás ya se habían convencido de los poderes mentales del adivino, ya era fácil que las restantes predicciones se cumpliesen, o bien, que, en caso de fallar, se debiese a un error de interpretación, nunca a la falta de poder del adivino. El problema es que el cerebro humano, de manera intuitiva, no es capaz de darse cuenta de estas cosas, y resulta sencillo engañarlo. Cuando ves a alguien acertar continuamente algo, “sientes” que tiene una capacidad “especial”; es necesario un análisis lento y detallado para comprobar que las probabilidades de acertar no eran tan pequeñas. También están las relaciones causales establecidas por coincidencias. Supongo que una vez, por pura casualidad, se le estropeó la cal a alguien justo cuando en aquella habitación había estado una mujer con la regla. La conclusión lógica era que, por alguna razón misteriosa, la menstruación estropea la cal. Parece algo inocente, pero relaciones causales de este tipo invaden las ciencias sociales de nuestros días, aunque de ese tema ya he hablado mucho :-). Es verdad que los físicos alejamos a Dios de nosotros cada vez más, pero pienso que la ciencia nunca podrá eliminarlo. En cuanto al asunto de la consciencia, por tu respuesta y la de Heimdall, reconozco que usé mal la palabra “clón”. Yo también estoy de acuerdo en que hay puntos flacos en mi argumento de la paradoja, pero son distintos. La idea que rondaba por todo el texto es reflexionar sobre la naturaleza de nuestra consciencia. ¿Es producto, exclusivamente, de los átomos que nos conforman, o hay algo más? No estoy intentando buscar el alma, sino tratar de entender por qué somos de la forma que somos. Verdaderamente, el fenómeno de la consciencia es extraño. Bajo ciertas circunstancias, a veces producidas por accidentes, ha habido casos en que una persona se ha desdoblado en otras dos completamente distintas. Un cerebro humano puede albergar una o varias consciencias. Por ello, resulta imposible asegurar de antemano que nuestra consciencia tenga una correlación simple y universal con la estructura física del encéfalo, esto es, que a un cerebro tal le corresponda una personalidad cual. Ahora bien, sabemos que la consciencia tiene alguna relación con nuestro cuerpo físico, dado que las piedras, por ejemplo, no la poseen. ¿Y cuál es su naturaleza? ¿Un mero efecto colectivo de un sistema físico formado por una serie de neuronas, al cual se le podrían aplicar los métodos de la Mecánica estadística? ¿Es un fenómeno clásico (quiero decir, regido por la Mecánica clásica, o bien, macroscópico) o cuántico (microscópico)? (esta es una pregunta muy de físico). Por no andar con lucubraciones extrañas, mal que le pese a Popper, proponía el experimento imaginario del mal llamado “clon”. Lo replantearé con mayor cuidado. Supongamos que la consciencia es algo material. Entonces, debería ser reproducible (este el punto vital del argumento). Quizá podríamos copiar la consciencia de una persona en un soporte distinto: crear un cerebro idéntico al mío a base de una red neuronal artificial (por ejemplo). En teoría de circuitos, a base de operaciones, puedo lograr circuitos con componentes distintos pero de comportamiento equivalente. Quizá una técnica mucho más avanzada que la nuestra sería capaz de algo similar con un cerebro humano. O bien, podría funcionar una copia idéntica, hasta el último átomo, de un ser humano – esto me parece menos probable, porque a la Mecánica cuántica le repugna la idea de copiar algo átomo a átomo, entre otras cosas, porque los átomos están deslocalizados, en cuyo caso, la idea de poner el átomo A en la posición B carece de sentido -. Supongamos que, de una forma u otra, hemos logrado reproducir una consciencia. Ya sé que puedo partir una consciencia en mitades del mismo tamaño que la original – cosa que es bastante extraña -, pero, ¿dos consciencias iguales, que residen en soportes distintos pueden fundirse? ¿Nos convertiríamos esa red neuronal y yo en la misma cosa, de manera que compartiríamos la información recibida desde ese instante? Intuyo que no, porque esas cosas no pasan cuando creamos circuitos equivalentes. Supongamos, entonces, que me volatilizan. Eso significaría que mi consciencia habría desaparecido. Por lo tanto, habríamos fracasado a la hora de reproducirla. Por consiguiente, mi consciencia no es algo material, dado que es un fenómeno irreproducible. ¿Por qué he rechazado la idea de una fusión de consciencias? La verdad es que no he dado razón alguna. Parece una idea poco acertada, pero ¿y si es un fenómeno cuántico, como piensa Penrose? La Mecánica cuántica, a veces, contradice ideas clásicas intuitivas. Si puedo fundir consciencias, quizá el argumento del párrafo anterior quedaría invalidado; el fenómeno sería, ahora, reproducible. Supongamos que hacen una copia de mi consciencia y, una vez efectuada, nos “congelan” a los dos. A mí me mandan a Alpha Centauri, y en la Tierra se queda mi “alter ego”. Empleando el tiempo que haga falta, sincronizamos dos relojes, uno en la Tierra y otro en Alpha Centauri. Entonces, despiertan a mi “alter ego” de la Tierra durante un segundo. Y en el momento en que lo vuelven a dormir, me despiertan a mí en Alpha Centauri. Si suponemos que hemos podido reproducir mi consciencia con la copia, ese fenómeno llamado “mi consciencia” es algo capaz de viajar a Alpha Centauri de manera instantánea. ¿Contradicción con la Relatividad? Sí, a menos que consideremos que la consciencia es un fenómeno cuántico, y que la creación de mi “alter ego” supone la formación de un sistema cuántico resultante de la fusión de ambas consciencias en una “superconsciencia”. En cuántica, que se sepa, las modificaciones de una parte de un sistema afectan de manera instantánea al resto, esté donde esté su parte material. Esto se ha verificado experimentalmente, y se estudia la posibilidad de usar esta particularidad para crear un sistema de comunicación instantáneo e inviolable – aunque muchos físicos opinan que no se puede transportar información de esta manera. En realidad, la cosa no está nada clara -. En resumen, si la consciencia es material, es reproducible. En tal caso, puedo hacer el experimento de irme a Alpha Centauri, que no viola ninguna ley física, y jugar a activarla y desactivarla, haciéndola ir de Alpha Centauri a la Tierra instantáneamente. Para conciliar esta idea extravagante hay dos posibilidades, siempre suponiendo que los fenómenos materiales son reproducibles: o bien mi consciencia es, exclusivamente, aquello que es consecuencia únicamente de los átomos concretos que me forman a mí, lo que abre la puerta a que una parte de mí es algo “inmaterial”, “místico” si me apuras, o bien, la reproducción ha creado una extensión de mi consciencia, que antes residía sólo en mí, y ahora está, además, en una red neuronal artificial. Esto sólo es plausible y compatible con la Relatividad si mi consciencia es un fenómeno cuántico. Falta, por último, un hecho que responde a las objeciones de Heimdall, al cual le dedicaré un texto tratando esto con más detalle. En el momento de su creación, mi consciencia y la de la red neuronal serán lo mismo. Pero, cuando recibamos la primera y minúscula sensación, en cuestión de millonésimas de segundo o menos, nos desdoblaremos en dos consciencias separadas. Esto no es un fenómeno demasiado extraño para la Mecánica cuántica, y ya se ha observado en cerebros normales. Cuando pueda, amplío esto en mi respuesta a Heimdall. Hasta pronto. P.D.: Por cierto, los viajes en el tiempo están prohibidos. Violan la Relatividad :-DDDDD. Pero en caso de ser posibles, diría que tu yo en el pasado, y tu yo del presente en el pasado serían dos consciencias distintas, dado que el del presente tendría experiencias y recuerdos de los que el otro carece. Por otro lado, si te desdoblas, pues eso. Durante un instante seríais la misma cosa, y después, os convertiríais en dos consciencias distintas. ¿Qué donde estaría tu verdadero yo? Bueno... ¡¡¡En las dos partes!!! (difícil de entender... yo tampoco lo comprendo :-))))) ) |
Ref: Mackay a Arga puesto el 25/7/01 2:06 |
Te debo texto :-). Pero ahora intentaré dormir, a ver si venzo al insomnio hoy. Que mañana debería madrugar. |
Ref: Arga a Mackay puesto el 25/7/01 2:18 |
Tú dormirás, pero te juro que a mí me has provocado, con tu último texto, un insomnio que no veas;-DDDD |
Ref: Argas y Mackay's puesto el 25/7/01 2:46 |
Comentarios sin preambulizar sobre las opiniones de Mackay y Arga sobre el amor y excusa para poner las mías. A veces no es tan imprudente generalizar, Arga. La naturaleza misma tiende a la generalización, y la singularidad se descarta por insólita, excepcional o inusual. No es una mala teoría la que expone Mackay, y desde luego, para opinar sobre el tema hay que conocerlo, por lo tanto experimentar, por lo tanto salir con unas cuantas,... preferentemente con unas muchas. Para los hombres sirve lo mismo, cuantos más conoces mejor puedes entenderlos y más te gusta la música. Quizás Mackay ha padecido la máxima que reza: El sexo reduce tensiones y el amor las provoca. Muchos la hemos comprobado. Por eso, y aunque no esté de acuerdo con todo lo que dice, me parece cuando menos que sus conclusiones tienen fundamento, aunque creo que ha pasado por alto,(o no?) una cuestión importante y es la de la Admiración; esa admiración que no la producen las grandes hazañas, la belleza, ni el bendito sexo, sino el cómo cada uno de nosotros se enfrenta a lo cotidiano. Esa fascinación es la que suele derivar en amor. Amor como algo realmente duradero y profundo y que, naturalmente, no puede aparecer sino lentamente y como consecuencia del conocimiento mutuo. Evidentemente que lo de la admiración se dá poco. El enamoramiento es otra cosa muy distinta y tal como viene se vá, porque te enamoras de un objeto, no del sujeto. Por lo tanto da igual lo que te esfuerces en agradar más o menos. Si se enamoran de tí puedes ser todo lo insustancial, borde, gracioso, soso, buena persona, mala persona, guapo o feo que quieras. Es un punto a favor del enamoramiento. En síntesis: 1 - La amistad, que tampoco es fácil, es un tipo de relación mucho más asequible y gratificante, principalmente porque te permite seguir siendo tú misma y tus defectos. Sin decepcionar a nadie. 2 - El sexo es la mejor manera de expresarse, conocerse y de comprenderse rapidamente cuando no hay admiración por medio, ni tiempo, ni ganas de comprobar si pudiera haber existido esa hipotética admiración. 3 - Aunque exista admiración siempre puede aparecer El o La Amante, que arrasa con todo y nubla cualquier valor cotidiano. Un caso de mala suerte, - sobre todo para el admirado abandonado - pero que se da mucho. 4 - Ni el primer punto ni el segundo excluyen el que sigamos buscando. Y aunque encontremos, seguir buscando. Como soy anónima no os ruborice a los enamorados y/o poetisos criticarme sinceramente. Las anónimas somos unas frescas. |
Ref: DAJO para... puesto el 25/7/01 3:21 |
ARGA. Pues imagínate yo: mañana tengo que levantarme también tempranito, ya me había acostado, puto dolor de cabeza, ataque feroz de insomnio, vueltas en la cama, alehop! a levantarse y encender el ordenador antes de empezar a darme cabezazos contra la pared... ¡y me encuentro con el texto de Mack! Ahora ya sí que no duermo pero na de na :-DDD Oye, que me alegro un montón por tu hija y por ti. MACKAY. Te responderé con calma, pero ya le estoy dando vueltas a un pensamiento: ¿por qué pensamos que la consciencia permanece invariable a lo largo del tiempo? Yo no soy el mismo que era hace una hora, porque el de hace una hora ya no existe: ha evolucionado, como los Pokemon :-DDD Pero por ahora lo único que quiero añadir es que he disfrutado como un enano leyendo tus reflexiones. Lo tuyo sí que es nivelazo. Y lo mío osadía, pero siempre he sido un poco atrevido con la autoridad competente. ANÓNIMA FRESCA. Bastante de acuerdo en lo que dices, aunque la palabra “admiración” me causa mucho repelús. En cambio, a “fascinación”, que utilizas luego como sinónimo, no pondría ningún reparo. |
Ref: DAJO para CRIS puesto el 25/7/01 3:33 |
Me encantaría ponerte aquí, donde nos conocimos de verdad, un pedassso de mensaje, pero ya sabes por qué no lo voy a hacer. Un besazo enorme, guapísima. |
Ref: puesto el 25/7/01 11:55 |
De estufa, corazón, te tengo a tí. Del Sabina. Proxi, oyendo música, terminando trabajos imprescindibles, sin saber si merece la pena empezar otros. |
Ref: Vagabundo puesto el 25/7/01 18:45 |
Visitad www.plantatuarbol.com Con ello ayudareis a la reforestacion de algunas zonas necesitadas,y si quereis ponedlo como pagina de inicio. GRACIAS |
Ref: hechicero puesto el 25/7/01 23:30 |
Hace fresco está noche, la bruma, que envuelve de forma continua esta tierra tambien me envuelve de forma casí total, suena suave la musica de Luar na Lubre y los gnomos, y los hados, que pueblan esta tierra, me acompañan en mi nostálgia por ti. Cae silenciosa esta noche, como un manto de cabellos oscuros o las profundidades del oceano suena suave la música, y me fundo con ella, y me transporta,y te trae a mi. Abrigate bien,hace frio aquí. hechicero. |