Ref: puesto el 4/1/01 11:03 |
Buenos días, Literario |
Ref: El 26 de diciembre... puesto el 4/1/01 12:55 |
Primera parte...
Antes de nada, deseo haceros llegar mis más sinceros deseos de felicidad para todos vosotros en este nuevo año, siglo y milenio que acaba de comenzar. He estado dos semanas ausente de esta entrañable sección debido a que he pasado fuera las vacaciones como viene siendo habitual desde hace muchos años. Un descanso no le viene mal a nadie, y creo que he venido con las pilas cargadas. El primer escrito de este año quiero dedicarlo a un asunto que ha sido de rabiosa actualidad en Almería, ciudad donde he pasado estas últimas jornadas. El día 26 de diciembre es fiesta local en la capital de la provincia ya que se conmemora la conquista de la ciudad por parte de los Reyes Católicos. En ese día, una procesión de carácter cívico recorre las calles que van desde el Ayuntamiento hasta la Catedral. En el cortejo, el concejal más joven de la corporación porta el estandarte que llevaron los monarcas cuando entraron en la ciudad. Una vez concluída una misa de acción de gracias, se repite el camino pero en sentido inverso. El acto concluye con una tremolación del estandarte en el balcón del Ayuntamiento ante el pueblo almeriense. Hasta hace unos años la fiesta, era eso, una fiesta pero de un tiempo a esta parte está siendo objeto de polémica. El motivo de la refriega tiene su origen en la conveniencia de reocrdar la figura de los Reyes Católicos cuando se tremola el estandarte. El alcalde los omitió, pero fue realmente sorprendente ver como el pueblo gritaba "Almería por los Reyes Católicos" con una fuerza tal que impedía oir al alcalde. *** TIBERIO. MMI *** |
Ref: Extraordinary people puesto el 4/1/01 21:48 |
Nos reímos mucho con los rociítos del corazón, modestos publicistas de su vulgaridad que pasan en dos semanas de la nada a la fama sin abandonar la nada, antes al contrario. También nos escandaliza un poquito, o eso decimos, la nueva generación de monstruitos marcianos que ha convertido la popularidad rosa-verdosa en sinónimo de ordinariez, («ordinary people» llama Angel Antonio Herrera a esta plebe del cuché). Y, en fin, nos desternillamos cuando esta tribu del trapillo que ultraja la sintaxis, ridiculiza la semántica y aplica la eutanasia activa al rubor intelectual va y nos confiesa que parte de vacaciones para descansar de las últimas fiestas, al tiempo que anuncia otro fiestón de inauguración de algo que a su vez será el pórtico de otras merecidas vacaciones. Es reír por no llorar. Desde el gunileo que inventó, fijó y esplendoreó Antonio Burgos en su día hasta la tamaropatía que infecta estas señaladas fechas, las anteriores y las que vendrán hay la misma distancia intelectual que entre don Ramón Menéndez Pidal y Paul Preston o entre don Claudio Sánchez Albornoz y Javier Tusell. La prosperidad económica de las clases populares tiene en Occidente una de sus manifestaciones más constantes en la prensa amarilla, que aquí estamos amamantando a los pechos de las revistas del corazón. Estamos en pleno tránsito del rosa al amarillo, precioso título y preciosa película del gran Manuel Summers al que ya sólo se recuerda -y cada vez menos- como el afortunado papá del cantante David Summers, ex líder de Hombres G. Pero las hembrillas y las hembronas, los cubrones (de cubrir) y los homúnculos verdeamarillos del cuché al menos cobran por descansar en público. En cambio, los hay que pagan por no descansar en vacaciones, como esa nutridísima Corte de Invierno que anda estos días por Baqueira esquiando en seco y acompañando al Rey y a Aznar en sus pobladas soledades. Lo de menos es esquiar, pero este año se han quedado hasta sin coartada. Qué más da. El verdadero deporte de los prohombres y prohembras de la Patria es el agenda-ball, léase peloteo de citas: con quién desayunas, con quién comes, con quién cenas y con quién copeas y chocolateas de madrugada. Ya nos ha contado Pedro Jota que en Baqueira llaman a la puerta, abres y es Rodrigo Rato disfrazado de Felipe González. Nos falta que Jesús Cacho se pierda unas Navidades por allí y nos haga la crónica de los nuevos «supergalácticos». Porque así llamaban sus señoras a los albertos y marios de la Era del Pelotazo: «supergalácticos», y las que estaban en las nubes eran ellas. Entonces, cuando todos eran felipistas, se jaleó a un niño andaluz que dijo en la tele: «mi padre trabaja en el paro». Los tiempos cambian horrores: ahora, la «extraordinary people» trabaja en descansar para poder trabajar todavía más. Y, a imagen y semejanza del líder, nunca se cansan. Estos no son de Aznar, son de Duracell. |
Ref: Sentir puesto el 4/1/01 23:35 |
Imagínate que existe un banco, que cada mañana acredita en tu cuenta, la suma de 86.400ptas, pero este banco, imagina que tiene la peculiaridad de no arrastrar tu saldo, y cada noche justo antes de irte a dormir, borra por completo el dinero que no usaste durante el día. ¿Qué harías?Te lo imaginas, seguramente retirar hasta el último céntimo, ¡pues claro! Como nosotros. Cada uno de nosotros tiene ese banco, su nombre es Tiempo, y cada mañana al despertar, te regala 86.400 segundos, cada noche cuando la vida duerme este banco borra y da por perdida cualquier cantidad de ese crédito que no has invertido en buenos propósitos, ese banco, ni arrastra los saldos ni permite sobre giros, cada día te abre una nueva cuenta y cada noche elimina sin remedios lo no gastado, por tanto si no usas tus depósitos del día, la perdida es sólo y exclusivamente tuya, no se puede dar marcha atrás, no existen los giros a cuenta de un depósito para mañana, debes vivir ahora, en y por el presente, con los depósitos de hoy, invierte pues a diario de tal manera que consigas lo mejor en salud, amistad, y felicidad, porque el reloj del día prosigue inexorablemente hacia la noche. De hecho para comprender el valor de un año, pregúntale a cualquier estudiante que perdió un año de estudio, si quieres comprender el valor de un mes, pregunta a una madre que alumbró a su bebé prematuro, si quieres saber el valor de una semana, puedes preguntar al editor de un semanario, si deseas alcanzar el valor de una hora, observa, observa los amantes los amantes que esperan para encontrarse, para comprender el valor de un minuto, pregunta a una persona que perdió el tren, y para alcanzar el valor de un segundo, mira a los ojos de alguien, que por los pelos evitó un accidente. Así que no te lo pienses, atesora cada momento que vivas, y atesóralo más, más si cabe si lo puedes compartir con alguien especial, lo suficientemente especial como para dedicarle tu tiempo, recuerda que el tiempo no espera para nadie, ayer es historia, mañana solo misterio y deseos inconexos, por eso es que mundo gira en presente, vive, vive pues el ahora. |