Ref: puesto el 7/8/99 10:33
Ref: Humanos con encanto puesto el 7/8/99 11:44

Cuando aparece una persona brillante que destila encanto y sinceridad se nos cae la baba y no podemos creer lo que estamos viendo.
Nuestro estado gris negruzco rechaza de inmediato el destello de la verdad sincera. ¿Es cierto que todavía existen esas personas?.
Es indudable, son las diosas y los dioses de este mundo apesadumbrado y triste. Son seres que sonríen de verdad, que besan de verdad, que sienten con verdadera nobleza, que son auténticos en tosas sus expresiones y saben apreciar y elogiar porque son conscientes del bien que hacen. Estos seres, quizá hoy más que nunca, los podemos encontrar en todos los sitios y gracias a ellos el oscurantismo necio e infame está perdiendo su valor único y desesperanzador. Yo he tenido la suerte de encontrarme con uno.
Aquí, en este mundo virtual al que yo considero no exactamente paralelo al real sino más bien convergente, se usa muy fácilmente el elogio, pero de lo que en realidad se abusa es de la adulación, que no es más que un sucedáneo del elogio. Esto último solo lo utilizan las personas superficiales en busca de éxito que no se dan cuenta de que la naturaleza sabia les delata en ellos mismos. Todo su interior se refleja en sus actos y expresiones. Sus palabras reflejan mediocridad. Intentan ganarse el interés de los demás a base de peloteo, que en muchas personas surge en forma de “elogio desnaturalizado”. O, como dice Carnegie: “la adulación es un elogio barato”.
Pero, ¿ porque dar tanta importancia al elogio?
Simplemente, porque la tiene, por que a todos nos gusta y porque queramos reconocerlo o no, lo necesitamos .
Los elogios son pensamientos poderosos cargados de energía positiva que nos dan valor y modifican el estado mental y físico en general. Generan actividad en la materia nerviosa del cerebro, produciendo cambios eléctricos y químicos en él. Todo debido a la actividad del pensamiento positivo.

Los elogios nos sorprenden porque despiertan en nosotros todas aquellas capacidades que están adormecidas, atrofiadas... Nos impulsan las actitudes y son capaces de transformar nuestras vidas, hacia aspectos en los que nos sentíamos incapaces.

Los elogios sinceros nos mentalizan, iluminan y fortalecen nuestras acciones.
Los estímulos esperanzadores nos alientan a vivir en otra auténtica realidad que es en sí misma tan verdadera como el realismo negativo.

La necesidad de regalar es una grata sorpresa de nuestra capacidad de amar.
Los elogios son regalos de los sentimientos nobles; producen sonrisas de felicidad.

Me consta que habrá personas que no compartan todo esto, pero es normal, ya que en nuestra sociedad se envidia la alegría, las sonrisas sinceras; los aprecios se desprecian... Los seres recomidos en su pesimismo no aguantan que otra gente pueda estar o ser de otra forma que no sea la suya.


Esencia
Ref: A la dignidad humana puesto el 7/8/99 11:53

"No puedo aceptar el daño,
aunque me venga del rey,
ni con corazón de buey
ni con alma de rebaño,
no soy fiero ni huraño,
pero sé en mi corazón
que al sufrir la humillación
el golpe y el atropello
prefiere mi vida el sello
de la actitud del león.
No se puede ser paciente
ante nadie ni ante nada
que nos trate atropellada
torcida y villanamente

(Miguel Hernandez)


Esencia
Ref: puesto el 7/8/99 12:41
Retiro el mensaje del día 3/8/99. No conste en acta.
Ref: puesto el 7/8/99 13:24
Cuenta la leyenda que una vez se reunieron en un lugar de la tierra todos los sentimientos y cualidades de los hombres.Cuando el ABURRIMIENTO había bostezado por tercera vez, la LOCURA, como siempre tan loca, les propuso: -¿jugamos al escondite? La INTRIGA levanto la cara intrigada, y la CURIOSIDAD sin poder contenerse preguntó: - ¿al escondite? ¿y cómo es eso? -Es un juego- explicó la LOCURA - en el que yo me tapo la cara y comienzo a contar desde uno hasta un millón mientras ustedes se esconden y, cuando yo haya terminado de contar, el primero de ustedes al que encuentre, ocupará mi lugar para continuar el juego. El ENTUSIASMO se halló secundado por la EUFORIA. La ALEGRIA dió tantos saltos que terminó por convencer a la DUDA, e incluso a la APATÍA a la que nunca le interesaba nada. Pero no todos quisieron participar.La VERDAD prefirió no esconderse; ¿Para qué? si al final siempre le fallaban y la SOBERBIA opinó que era un juego muy tonto (en el fondo, lo que le molestaba era que la idea no había sido suya), y la COBARDÍA prefirió no arriesgarse... Uno, dos, tres... comenzó a contar la LOCURA. La primera en esconderse fue la PEREZA, que, como siempre , se dejó caer tras la primera piedra del camino. La FE subió al cielo, y la ENVIDIA se escondió tras la sombra del TRIUNFO, que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol más alto. La GENEROSIDAD casi no alcanzaba a esconderse; cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos: ¿que si un lago cristalino? ¡hay ideal para la BELLEZA!; ¿que si la rendija de un árbol? ¡perfecto para la TIMIDEZ!; ¿que si el vuelo de una mariposa? ¡lo mejor para la VOLUPTUOSIDAD!; ¿que si una ráfaga de viento? ¡magnífico para la LIBERTAD!Así que termino por ocultarse en un rayito de sol, el EGOÍSMO, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado, cómodo... eso sí, sólo para él. La MENTIRA se escondió en el fondo de los oceanos (¡mentira, en realidad se escondió detrás del arcoiris), y la PASIÓN y el DESEO en el centro de los volcanes, el OLVIDO... ¡se me olvidó donde se escondió!... pero no es lo importante. Cuando la LOCURA contaba 999999 el AMOR aún no había encontrado sitio para esconderse, pues todo se encontraba ocupado, hasta que divisó un rosal y, enternecido decidió esconderse entre sus flores. -¡Un millón!- contó la LOCURA y comenzó a buscar. La primera en aparecer fue la PEREZA, sólo a tres pasos de la piedra. Después escuchó a la FE discutiendo con Dios en el cielo sobre zoología, y a la PASIÓN y al DESEO los sintió en el vibrar de los volcanes. En un descuido encontró a la ENVIDIA, y claro, pudo deducir donde estaba el TRIUNFO. Al EGOÍSMO no tuvo ni que buscarlo; él solito salió desesperado de su escondite que había resultado ser un nido de avispas. De tanto caminar sintió sed y al acercarse al lago descubrió a la BELLEZA.Y con la DUDA resulto más fácil todavia, pues la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aún en que lado esconderse. Así fue encontrando a todos: el TALENTO entre la hierba fresca, la ANGUSTIA en una oscura cueva, la MENTIRA detrás del arcoiris...(¡mentira, sí ella estaba en el fondo del océano!), y hasta el OLVIDO, al que ya se le había olvidado que estaba jugando al escondite. Pero solo el AMOR no aparecía por ningún sitio. La LOCURA buscó detrás de cada árbol, bajo cada arroyuelo del planeta, en la cima de las montañas y, cuando estaba apunto de darse por vencida, divisó un rosal y las rosas... Y tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas, cuando de pronto un doloroso grito se escuchó. Las espinas había herido en los ojos al AMOR , la LOCURA no sabía que hacer para disculparse; lloró, rogó, imploró, pidió perdón, y hasta prometió ser su lazarillo. Desde entonces , desde que por primera vez se jugó al escondite en la tierra, EL AMOR ES CIEGO Y LA LOCURA SIEMPRE, SIEMPRE, LE ACOMPAÑA.
Ref: Napoleón puesto el 7/8/99 18:43
"Tan mal me quiere usted que también me elogia?"
Ref: Sagitario puesto el 7/8/99 18:53
Un día nos tienes que explicar qué o quién te ha hecho daño para que en tus mensajes la fragancia de una frustación, como tú dices, "recomida", palpite entre cada par de líneas, Esencia.
"Los seres recomidos en su pesimismo no aguantan que otra gente pueda estar o ser de otra forma que no sea la suya."
Los pesimistas, además de serlo, no aceptan a nadie distinto de ellos? De dónde te has sacado eso?
Ref: Rafa para todos. puesto el 7/8/99 23:21
Leyendo estos pensamientos, se me ocurre uno: -Anoche pensando en tí. -Sentí un presentimiento. -Se me fué bajando el viento -¡¡COJONES, QUE ME PEÍ !! Rafa.