Ref: Leido en las news puesto el 10/3/02 8:48

EL ONANISMO, LA MASTURBACIÓN O EL PLACER SOLITARIO. Según relata la Biblia, el segundo hijo de Judá, Onán, a su vez nieto de Jacob, ante la imposición divina y paterna (y en virtud de lo dispuesto por la Ley del Levirato) de procrear con Tamar, la viuda de su hermano mayor Er, optó por vaciar sus depósitos seminales en cualquier sitio que no fuese la vagina de su cuñada, y así evitar el fruto de un contacto sexual carente de amor que a los ojos de la iglesia actual hubiese sido un mortal pecado. No aclara la Biblia si Onán disfrutaba con esta actividad. También abre la puerta a la sospecha de que fuese el auténtico precursor de la "marcha atrás", aunque esa posibilidad le quita todo el encanto a la historia. Pero, en aquella época el concepto pecado era bien distinto, ya que a los ojos de Jehová esa aproximación al incesto estaba bien vista, habida cuenta de que también toleró el menage a trois que tenían montado David, Micol y Jonatán. En cambio, la dilapidación del esperma era motivo de fulminantes castigos. La Biblia no explica de forma muy clara de que método se valió Jehová para exterminar al desobediente Onán, pero, el pobre no gozó del beneficio que otros judios, hebreos, israelitas, sionistas...o llamadle como querais, habían tenido al considerarse redimidos mediante el sufrimiento propio y de las consabidas 7 generaciones posteriores, y el pobre quedó estigmatizado por lo siglos de los siglos como el padre del Vicio Solitario. Como anécdota, referiremos que al final Tamar se salió con la suya. Mediante una burda estratagema, Judá, la dejo embarazada de gemelos al yacer con ella sin haberla reconocido, pensando que se trataba de una prostituta. Observemos que Judá no sufrió ningún castigo divino por "ir de putas" ni por despistado. Podríamos decir que es el inicio de la persecución desatada por el judaismo y posteriormente por el cristianismo contra la autosatisfacción. Algunos siguen impertérritos, sin enrojecer y sin dudar, manteniendo y no enmendando la sarta de disparates con que muchas generaciones de católicos forzosos se vieron intimidados para no realizar tan placenteras prácticas. A saber, se secaba la médula, producía ceguera, salían granos, y además era un pecado que no tenía redención. En el capítulo SEXUALIDAD Y CRISTIANISMO, de la obra del teólogo disidente alemán Karlheinz Deschner, OPUS DIABOLI, hemos encontrado la siguiente información que transcribimos literalmente: (( A falta de hombres y no permitiéndoseles a las monjas ni siquiera un padre confesor, habían de conformarse a menudo con niños, cuadrúpedos o aparatos completamente inanimados pero causantes de placer, de factura muy primitiva, a veces, pero también falos artificiales con sus bolsas testiculares llenas de leche que, simulando una eyaculación, derramaban en el momento de máxima tensión, fría o caliente, en la vagina más o menos virginal. No sin razón llamaban en Francia "bijoux de religieuse (alhaja de religiosa) a estos substitutivos. Al morir en 1783 Marguerite Gourdan, la más famosa de las Madames del siglo -fabricante además de los más refinados artificios de consolación- se encontraron en su casa centenares de pedidos de tales "bijoux" procedentes de conventos franceses.)) Pues, juzgad vosotros mismos....."-Haced lo que yo os diga, pero no haced lo que yo haga", decían no hace mucho algunos administradores de la moral. Nosotros preferimos una cita de Woody Allen que dice :"- Hay que tomar muy en serio la masturbación, es sexo con la persona que más amas".

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