Ref: El paso de cebra puesto el 5/4/01 0:55 |
Si algún día usted decide utilizar una de esas gruesas líneas blancas, o grises, que más da, que van de un lado a otro de la calle, sepa primero que probablemente fueron inventadas por alguna mente ingenua con demasiada fe en el ser humano. Yo en su lugar agotaría antes otras alternativas más seguras, como podrían ser el semáforo, el paso subterráneo, el globo, el parapente, la catapulta, o si no siente pereza al caminar, el rodeo. Pero si usted al final, en un acto de valentía y queriendo hacer valer sus derechos cree que lo mejor es usar el mencionado invento, siga leyendo. Mire siempre hacia los dos o más lados, pero no se conforme únicamente con mirar, vigile, visione, verifique, vaticine, y como las precauciones nunca son demasiadas, presienta, premonice, presagie, predizca, pronostique, profetice, trate de intuir de que extraño y desconocido lugar, puede de pronto, surgir ese ingenio de aparición espontánea, que es el coche. Si no pudiera hacerlo porque se ha olvidado la bola de cristal y el tarot en casa, muy a mi pesar, he de sugerirle, y no me subestime, que subordine la superstición a su suerte, para sustituir el suspense por la subsistencia, y suceda lo que suceda supere el suplicio, sin sucumbir a la sugestión suicida que le subraya la superficie. Para ello, un sistema que parece dar buen resultado, es cruzar pisando exclusivamente las líneas blancas. Como comprobará, para ello deberá usted alargar gradualmente la zancada, y si no es persona patilarga, sepa que inevitablemente acabará saltando. Haga todo lo posible por atender, asimilar, agudizar, ande, pero aplíquese, agilice, asegúrese y acierte, no se le ocurra jamás profanar con su dubitativo pie las prohibidas rayas grises. Si encontrándose indeciso sobre la acera, un conductor aparentemente amable le hace señales con la mano, compruebe que esa mano habla el mismo lenguaje que usted, pero no se confíe, mírele a la cara que es el espejo del alma conductora e intente averiguar sus verdaderas intenciones. Sobre todo si advierte una... ¿Cómo le diría yo? Sí, eso, una sonrisa parecida a la de la Gioconda, no se fíe un pelo, suelen padecer del tic del pedal, y pegada al asfalto no sé como quedaría su carne de Mona, pero de Lisa le aseguro que bastante. Le será de gran ayuda saber también que los días más favorables para cruzar un paso de cebra son jueves, viernes y sábado, de domingo a miércoles le aconsejo que ni lo intente. Sabiendo todo esto ya está listo para emprender la hazaña, y cuando lo halla hecho trate de recordar qué había venido a hacer a este lado de la calle. |
Ref: Belfegor puesto el 5/4/01 7:30 |
Pero... Pachuca, ¿Qué haces tu por aquí a estas horas tan intempestivas? Yo pensaba que era el único mono con corbata que se asomaba a esta ventana a la luz del amanecer... ¡Je, je, je ! Las habichuelas... ¡qué caras son! |
Ref: PEPILLO puesto el 5/4/01 10:07 |
A los wenos días (Dos monosílabos y dos bisílabos). |
Ref: Toni puesto el 5/4/01 12:24 |
Total.... tres palabras y una letra. |
Ref: Josué puesto el 5/4/01 18:06 |
Hola ¿de donde eres? |
Ref: ninfa19 puesto el 5/4/01 23:58 |
Hola desde Sevilla, algún chico quiere hablar conmigo. Estoy muy aburría aquí solita. |